Cocina de mercado, vinos con alma y mucha magia en Chamartín

Anica es de esos sitios donde te sientes cómodo, cuidan cada detalle y mezclan producto, técnicas y diversión. Cocinar a baja temperatura, platos de temporada, coctelería con historia y vino, buen vino… Ideal para todo tipo de plan: un afterwork, una cata de vinos, una cena con amigos…. Si estás por Chamartín y quieres un viaje de sabores con risas, vino y hasta algún truco de magia, este es tu sitio.

Pero Anica no es solo cocina. Es también un paraíso para winelovers y por eso nos gusta: aquí se bebe bien, se marida con sentido y se aprende sin pretensiones. Su carta de vinos está pensada para seducir sin abrumar, con referencias nacionales bien escogidas, clásicos con chispa, joyas de Madrid y etiquetas que hablan del terruño. ¿Quieres más? Pues entre semana puedes encontrar desde una cata con expertos del vino de la mano de WineisSocial con Marta Clot hasta un afterwork con copa de blanco y croqueta de chipirón. Los domingos, vermut, música en directo y el ambientazo de barrio bien hecho. Y si vas por primera vez, apunta:

No te vayas sin probar:

  • El tartar de navajas con wasabi y tobikko, plato insignia.
  • El steak tartar sobre tuétano asado, potente y meloso.
  • Las croquetas de fabada, cremosas y adictivas.
  • Y un buen vino por copa: deja que te recomienden: buena selección de vinos nacionales bien servidos.
  • 🍽 Maridaje recomendado: Steak tartar + tinto con crianza y nervio.

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📍 Madrid (C/ Profesor Waksman 5)
📞 Teléfono: +34 914579203
🕐 Cierra el lunes
🌐 Instagram: @anicawaksman

Wine is Social en Anica, la cata con Marta Clot

Doce winelovers, Marta Clot al mando, y una mesa larga en Anica llena de copas, curiosidad y muy buen rollo. Así fue una de nuestras catas más especiales: encuentros pensados para conocer a nuestros socios y compartir, descubrir y disfrutar del vino sin complicaciones, pero con mucha emoción.

Catamos vinos fabulosos de productores muy precisos: Viña Salceda, Alonso&Pedrajo, Chivite, Frontonio, Dominio de Elbio y terminamos con unas burbujas, de Privat. Todo, maridado con la cocina creativa de Anica. Y entre sorbos y bocados aprendimos, reímos y brindamos como si nos conociéramos de toda la vida. Porque eso es lo que buscamos en estos encuentros: romper la formalidad, acercar el vino a la gente y celebrar lo social, lo humano y lo sabroso.

📍Esto no acaba aquí. Seguiremos organizando catas, eventos y momentazos winelover en nuestros restaurantes favoritos. Porque el vino no es solo lo que hay en la copa. Es también lo que pasa alrededor.