Places We Love: Marisquería El Yerno
El Yerno, no una marisquería cool ni un wine bar de diseño: es un bar de mercado. De los de verdad. De los que cada día están llenos de gente que sabe lo que viene a buscar: el mejor marisco y el mejor vino.
El Yerno, no una marisquería cool ni un wine bar de diseño: es un bar de mercado. De los de verdad. De los que cada día están llenos de gente que sabe lo que viene a buscar: el mejor marisco y el mejor vino.
Este restaurante es un homenaje a la esencia 100% japonesa, donde la gastronomía asiática se fusiona con un toque moderno y local que te sorprende en cada plato.
Este wine bar, ubicado en el interior de la Bodega Perelada, es mucho más que un simple lugar para beber vino. Es un templo dedicado a los vinos de calidad y a la gastronomía auténtica del Empordà.
Os vamos a revelar cómo el Champagne potencia cada plato o, más bien dicho, platazos creados por Víctor Torres (QUIRAT)
Desde el momento en que pones un pie en Deleïte, sabes que la experiencia culinaria no es solo sobre comer, ¡es sobre disfrutar!
No todos los vinos son buenos aliados del jamón: hay vinos que podrían arruinarte la experiencia y seguro que ni te lo imaginas. Aquí van 5 maridajes infalibles, lo creas o no.
Te proponemos un fondo de armario básico: vinos atemporales, versátiles, todos por menos de 15 euros y con sus perfectos maridajes otoñales.
No hay un solo vino para un queso, ni un solo queso para un vino. Las posibilidades son infinitas pero atinar con el maridaje perfecto no es tan sencillo. Por ello, contactamos con uno de los mayores expertos en quesos de España, Toni Gerez.
No es lo mismo una comida formal que un picoteo, una barbacoa que una mariscada, una cena romántica que una fiesta con multitud de amigos. Os hemos preparado una pequeña ‘chuleta’ fácil y resultona para las noches de verano.
Este no es un artículo sobre qué vino con qué plato. Aquí iremos más allá, directos a la esencia y a los componentes estructurales del vino y la comida que hacen que entre ellos todo nos sepa a gloria o, por lo contrario, perdamos sabor. O peor aún, que el resultado sea incluso desagradable.